UN CASO DE EMPRESA FAMILIAR (Viaempresa 21/5/18)

Publicado en Viaempresa el 21/5/18

El método del caso es una metodología empleada en muchas escuelas de negocios para servir de base para la discusión en grupo, después de un análisis individual. No pretende ilustrar una buena o mala actuación. Este es un breve ejemplo de uno relativo a una situación “típica” de empresa familiar.
Juan y Pedro son dos hermanos gemelos, casados curiosamente con dos hermanas también gemelas. Heredaron cada uno un cincuenta por ciento de un concesionario de coches con taller y nave, de su padre, en Balaguer (Lleida).
Juan, al acabar el bachillerato, entro a trabajar en el taller en 1969. Sus hijos han trabajado en el negocio desde pequeños durante los veranos. Su hijo Raimon, el mayor, soltero, siempre ha sido muy centrado, hasta se saco el título de piano en el conservatorio Enric Granados de Lleida. Estudio ciencias empresariales y lleva trabajando en el negocio desde hace siete años. Juan siempre lo ha visto como su sucesor.
Su hijo Oleguer es más de otro cantar, mal estudiante y un poco “cabra loca”. Hace cuatro años que vive en pareja con una chica, que tiene un hijo, y con la que hace un par de años monto una página web para vender recámbios de segunda mano de coches clásicos; con los que ocupa, gratuitamente, buena parte de las instalaciones.
Pedro hizo oposiciones y es inspector de la seguridad social en Girona. Tiene dos hijos casados que viven en Barcelona. Siempre ha tenido confianza absoluta en su hermano y nunca le ha pedido explicaciones cuando al encontrarse por Navidad, Juan cada año le da el dinero correspondiente a su parte del negocio.
En 2013, al volver de vacaciones, un viernes por la noche, Raimon, antes de salir de fin de semana de excursión con unos amigos, dice a su padre que quiere dejar la empresa para montar una banda de jazz y conocer mundo. Después de hablar con su mujer, Juan decide quedar a desayunar al día siguiente con su gestor, y amigo de toda la vida, para ver que le aconseja hacer. De camino al encuentro, recibe un whatsapp de su hermano Pedro en el que le dice “has de comprarme mi parte del negocio”.
¿Cuáles son los síntomas del caso? ¿Por qué es la situación la que es? ¿Qué alternativas hay? ¿Cuáles son los pros y contras de cada una? ¿Cuáles los criterios de decisión? ¿Qué ponderación hay que dar a cada uno para decidir? ¿Qué es lo que ha de hacer Juan? ¿Cómo? ¿Cuáles son los aprendizajes que podemos sacar del caso?
A lo mejor el lector esperaba que esta columna de respuesta a estas cuestiones. Pero el objetivo no es dar soluciones, sino una herramienta para poderla compartir con el resto de su familia (añadidos incluidos) empresaria, trabajen en la empresa o no. Para dialogar sobre un caso ficticio, escuchando los razonamientos de los demás. Porque el diálogo es la grasa de la maquinaria de la empresa familiar.

 

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