Publicado diario EXPANSION 25/06/12
Seamos sinceros y realistas, los negocios y la economía están “como nunca “. No estamos en una recesión. Estamos en una depresión. Pero aunque grave, no es el fin del mundo. No está pasando nada que no haya pasado antes en la historia de la humanidad. La situación negada durante demasiado tiempo por algunas personas, ha llevado a que finalmente se pongan en marcha reformas, dolorosas, pero necesarias, que sentaran las bases para la recuperación económica.
Entendemos que la situación de caja obligue a aumentar temporalmente la presión fiscal, pero la reducción del déficit se ha de centrar principalmente en la reducción y racionalización de los gastos en todas las administraciones, porque el aumento de la presión fiscal penaliza las inversiones de las empresas y el consumo de las familias, y el consumo es el principal motor de las economías desarrolladas.
La subida del IVA probablemente sea inevitable. Pero sí el aumento de la presión fiscal genera un descenso de los resultados empresariales y del consumo, el escenario final será aun peor. Hace falta una reducción de las cargas sociales reales y de peso, para que la producción nacional gane competitividad.
Con ajustes todos sabemos que no es suficiente. Hay que ayudar y estimular la recuperación de la actividad económica para volver a crear puestos de trabajo y reactivar el consumo interno. Es necesario dar financiamiento a la economía real. En este sentido, desde Comértia pedimos crédito fiscal automático a cinco años, sin avales, al tipo de interés de la deuda pública, por el importe del IVA ingresado los últimos12 meses, hasta un máximo de un millón de euros por empresa.
Miremos al futuro, ahora estamos entrando en una nueva etapa llena de retos que nos ha de motivar a todos. Por que? Porque los únicos que no tienen problemas ni oportunidades terrenales son los muertos, y nosotros, gracias a Dios, estamos vivos. En esta nueva etapa alentadora, lo importante no es sí caes, si no como te levantas.
No podemos pensar en volver al pasado, si no en construir el futuro. Esto no significa que tengamos que olvidar el pasado sino que hay que analizarlo con tranquilidad y objetividad para evitar que se repita y para pedir las responsabilidades pertinentes.
Los empresarios de retail de Comertia somos conscientes del reto actual y de lo que espera la sociedad de nosotros. Somos realistas y positivos, y por eso ajustamos las velas de nuestros barcos. vigilemos la caja como nadie, y al mismo tiempo, mantener con prudencia, nuevos proyectos, como demuestra la apertura de más de 42 puntos de venta en lo que llevamos de año .Sabemos que nuestros negocios han de ser rentables para poder mantenerlos y seguir creando puestos de trabajo. Por eso nos preparamos para construir el futuro